Artículo publicado en Núvol-Digital de Cultura.

En un peculiar pueblo ampurdanés de 6,72 km² y 386 habitantes tiene lugar cada dos años la que dicen que es la bienal más pequeña del mundo. Y ya sabemos, «en el bote pequeño está la buena confitura (y el mejor veneno)». También es conocida como la bienal más breve del mundo: dura apenas 24 horas. Y, «lo bueno, si breve, dos veces bueno».

Iniciativa del artista argentino residente en Londres, Mario Flecha y Carolina Grau, la bienal de Jafre llega a la octava edición. Con carácter de Fiesta Mayor expandida, cena popular incluida, este peculiar encuentro bianual esconde en algunos rincones del pueblo sorpresas en forma de vídeo, audio, fotografía, instalación, pintura … Este año, los comisarios Camila Canellas, Miha Colner, Inés Jover, Cuauhtémoc Medina, David G.Torres y Daniel Teruggi han escogido las obras de una veintena de artistas que exploran el miedo y los mecanismos que lo animan.

Hilofobia, ombrofobia, omfalofobia, xantofobia … son nombres tan extraños para temores tan insólitos como la fobia a los árboles, a la lluvia, los ombligos o al color amarillo. El pánico parece que nos liga a lo más animal, los instintos, a lo irracional, pero el miedo es también un arma de control: nos hace frágiles y manipulables. «El miedo es de uno mismo. El terror, de todos» se escucha en Cita a ciegas, pieza sonora de Viviana Lombardi. Una calle más arriba, encontramos Trepanación (Sonidos de la morgue) de la artista mexicana Teresa Margolles, obra que nos adentra en las intimidades de un depósito de cadáveres para hacernos testigos auditivos de la perforación de un cuerpo inerte. Así, lo invisible permanece invisible pero los silenciados recuperan la voz. Margolles expone la violencia exacerbada de los cárteles mexicanos de forma metonímica. Como la lengua perforada del joven punk o las sábanas embebidos en sangre de las víctimas de los narcos, «para que las víctimas no sean mercancía de desecho» – llora Cita a ciegas de Lombardi.

El horror es Medusa. La barbarie es tan potente que ciega. Por ello, el argentino Enrique Jezik aborda la capacidad de destrucción humana desde la metáfora y el símbolo. En el vídeo Desmonte, una casa es derruida por tres excavadoras en tan sólo una hora. O el sugestivo readymade Una bolsa de bridas usadas sujetas por una brida de Antonio Ortega. Agresión velada donde este eficaz objeto de inmovilización se enreda en una esquina creando un embrollo sin sentido.

No hay que ir demasiado lejos ni en el espacio ni en el tiempo para encontrar testigos de las atrocidades cometidas en nombre de un ideal. Jonathan Allen, Maha Maamoun y Osama Dawod examinan la eficacia del miedo como instrumento político de control. A Twenty First Century Silks, vídeo monocanal hipnótico por su sencillez y austeridad, Allen despliega banderas con iconos populares e ideas abstractas que revelan los temores de nuestra sociedad: la guerra, Mickey Mouse, la fe, el dinero, las armas, la ley …

Night Visitor de Maha Maamoun y T & N de Osama Dawod recuerdan los abusos de poder y las vulneraciones de los derechos humanos perpetrados en momentos de especial tensión e incertidumbre política. «Night Visitor», término coloquial usado para designar la práctica del régimen de Mubarak de detener activistas políticos durante la oscura, compila vídeos de entradas furtivas a edificios de máxima seguridad estatal. Por su parte, Osama Dawod capta el momento en que los trabajadores de la cadena El Tawheed & el Nour abandonan su puesto de trabajo después de una dura jornada de trabajo justo en el momento en que los Hermanos Musulmanes tomaban el control del país .

El trabajo aliena (Marx dixit). La masa también (Freud dixit). Dos artistas tan diferentes como Sylvie Blocher y Younes Rahmoun exploran la universalidad de nuestros temores. La evocadora cinta de animación Habba del artista marroquí Younes Rahmoun narra el viaje místico de una semilla extraterrestre que emmigra en busca de un territorio donde crecer y reproducirse. Deseo, incertidumbre, miedo. La artista francesa Sylvie Blocher propuso una performance participativa donde todo el que quiso pudo escribir su angustia más grande en un bloc de notas. Durante el 5 de agosto, algunas de las frases se trasladaron a cartulinas que se colgaron como si se tratara de ropa tendida para formar un gran mural. Los miedos más repetidas: a la muerte, a la traición, al otro. Al día siguiente, como clausura de la bienal, todas las turbaciones se incineraron. Las cenizas se depositaron en un bache donde tiempo antes se alzaba un árbol ahora ya muerto. Pronto, una placa invitará a los paseantes a lavar sus temores en este punto.

«El humor es el proceso que permite dar un paso a un lado de la realidad cuando ésta se vuelve demasiado angustiosa» creía André Breton. Las fotografías de Jaka Babnik capturan las paradojas visuales que aparecen espontáneamente en el paisaje cotidiano. trabajo topográfico en el anverso de Bernd & Hilla Becher, retrata espacios urbanos caóticos carentes de sentido que han perdido su función original (si es que nunca la tuvieron), imágenes absurdas que hacen que nos preguntamos Why so Serious

Ciertamente, las adversidades es mejor tomárselas con (buen) humor. Por ello, Marc Serra, artista que tiende a la obra meta-conceptual de carácter multimedia presenta en esta ocasión una pintura «offline» -como el mismo artista la llama- realizada on demand por su padre, pintor hiperrealista autodidacta a partir de un famoso meme. En Batman Would Have Kicked You el superhéroe quiróptero espeta mientras nos abofetea «eres artista conceptual porqué no sabes dibujar». En arte, como en la vida, hay que matar al padre (metafóricamente hablando, claro). Y, ¿qué mejor manera de acabar con él que apropiándose de su trabajo? Esto es lo que ha hecho Xavier Aballí,  quien ha copiado las date paintings de On Kawara en dos réplicas actualizadas que datan del 17 de mayo (día en que el artista recibió la invitación a la bienal vía correo electrónico y 5 de agosto , día de la inauguració.

La intervención más temible de todas para un Millennial la planteó Mario Santamaría: 23/04. Así, la conectividad de la red wifi del pueblo dejó de estar operativa durante una hora los dos días que duró la bienal. Sesenta minutos que se presentan perfectos para aprovecharlos lavando nuestros miedos al monumento -confesionario de Sylvie Blocher. Los ateos también necesitamos espiritualidad.

En la imagen, obra de Marc Serra | Foto: Xavier Vila Soler